Pausa
Para hoy, sugerimos hacer una pausa en el camino de la adoración. ¡La música, las letras centradas en Dios y cantar juntos son formas bíblicas en que la iglesia ha adorado durante siglos! Considere usar una de las canciones de nuestro propio equipo de adoración, Lean In de VIctory House Worship:
“Vengo a sentarme a Tus pies
Y te traigo todo lo que soy
Me encuentras aquí de rodillas
Y Tú me das todo lo que eres”
La canción se puede encontrar en este enlace, y la letra se puede encontrar en el cuadro de descripción debajo del video.
Deja que la letra se convierta en una oración de tu propio corazón. Recuérdate a ti mismo que Dios se sienta por encima de todos los asuntos de tu vida, y haz aquello para lo que fuiste creado: ¡disfruta de Su presencia y dale gloria!
Restablece
Mateo 5:38-42 (NVI)
Ustedes han oído que se dijo: “Ojo por ojo y diente por diente”. Pero yo les digo: No resistan al que les haga mal. Si alguien te da una bofetada en la mejilla derecha, vuélvele también la otra. Si alguien te pone pleito para quitarte la camisa, déjale también la capa. Si alguien te obliga a llevarle la carga un kilómetro, llévasela dos. Al que te pida, dale; y al que quiera tomar de ti prestado, no le vuelvas la espalda.
CAMINA CON DIOS
¿Qué te llamó la atención de las palabras de Jesús hoy? ¿Te vino a la mente un ejemplo de tu propia vida? Siéntate con el Señor por un momento para ver lo que Él te puede estar diciendo.
¿Alguna vez has querido desquitarte, pagarle a alguien por lo que te hizo?
Es fácil pensar en ejemplos de la infancia, pero ¿qué pasa con los últimos tiempos cuando sentiste que un amigo o compañero de trabajo te trataba injustamente? ¿Cómo manejaste cualquier pensamiento de querer desquitarte?
¿Te imaginas ser abofeteado y elegir no abofetear en respuesta? Eso es lo que Jesús está diciendo aquí. Sin represalias. Ninguno. ¿Cómo puede esto afectar sus interacciones hoy o cualquier interacción que haya estado en su mente recientemente?
Recordatorio: esta sección es del mismo pasaje donde Jesús anunció Su cumplimiento de la ley. Tu comportamiento perfecto cuando se trata de represalias no te hará ganar una relación con Dios. Dale la bienvenida a tus tensiones relacionales, las situaciones en las que te sientes tratado injustamente, y recibe Su gracia, sabiduría y paz.